La pérdida de peso drástica tiene muchos beneficios. Sin embargo, después de la cirugía de reducción de peso o de una pérdida sustancial de peso, la piel y los tejidos a menudo carecen de la elasticidad necesaria para adaptarse al tamaño corporal reducido.

El contorneo quirúrgico del cuerpo tras una pérdida considerable de peso elimina el exceso de grasa y piel flácida, a la vez que mejora la forma del tejido de soporte subyacente. El resultado es una apariencia más normal con contornos más suaves.

¿Es adecuado para mí? 
Los procedimientos de contorneo del cuerpo pueden incluir:

  • Estiramiento facial: flacidez de la zona media del rostro, la papada y el cuello
  • Levantamiento de los senos: senos flácidos y aplanados
  • Abdominoplastia ("tummy tuck"): exceso de piel que cuelga sobre el abdomen
  • Estiramiento de la parte inferior del cuerpo: flacidez del abdomen, las nalgas, la ingle y el lado exterior de los muslos
  • Estiramiento de la región media del muslo: flacidez de los lados interior, exterior y medio del muslo
  • Braquioplastia (estiramiento de brazos): flacidez de los brazos

En general, los buenos candidatos para un contorneo del cuerpo son:

  • Adultos cuya pérdida de peso se ha estabilizado
  • Personas sanas sin problemas de salud que afecten la curación o que aumenten el riesgo de la cirugía
  • No fumadores
  • Personas con objetivos realistas y con una actitud positiva
  • Personas comprometidas a mantener un estilo de vida saludable con una nutrición y régimen de ejercicios físicos adecuados